Secciones amansalocos
De "El canto del pájaro", Anthony de Mello
El discípulo se quejaba constantemente a su maestro:
«No haces más que ocultarme
el secreto último del Zen».
Y se resistía a creer sus negativas.
Un día, el Maestro lo llevó a pasear por el monte.
Mientras andaban, oyeron cantar a un pájaro.
«¿Has oído el canto de ese pájaro?»,
le preguntó el Maestro.
«Sí», respondió el discípulo.
«Bien; ahora ya sabes que
no te he estado ocultando nada».
«Sí», asintió el discípulo.
martes, 3 de abril de 2012
"Me refiero a los Játac"
Peramo, Carlos: Me
refiero a los Játac,
Bruguera,
Barcelona, 2007, pp. 213-214.
[…] Respiré hondo y logré tragarme las lágrimas.
Entonces capté de nuevo aquel olor desconocido, aquel perfume agradable. Alcé
la cabeza, olisqueé el aire.
̶ Es Anaïs Anaïs ̶ anunció Vanesa, muy seria ̶ , Me la he comprado hoy. ¿Te gusta?
Recordé entonces la de veces que yo había
bromeado diciéndole que me divorciaría de ella si se le ocurría cambiar Eau Fraîche
por otra colonia. Aquella casualidad, que tratándose de Vanesa no tenía nada de
casual, me golpeó con fuerza y me asustó, porque confirmaba lo que acababa de
ocurrir entre nosotros con mayor contundencia que la que había logrado con
palabras. Sin Eau Fraîche Vanesa era otra persona, y yo también.
̶ Lo sabías, ¿verdad? ̶ dije.
̶ No sabía como decírtelo ̶ asintió bajando la mirada.
̶ Yo tampoco.
Tenía que marcharme cuanto antes, pero me
senté en el sofá. Un momento y me voy, me dije, sólo un momento. Cerré los
ojos. Permanecimos un rato sentados sin decirnos nada, mirando el televisor
apagado, Vanesa con el mando a distancia en la mano aunque sin decidirse a
utilizarlo. Nuestras rodillas se tocaban ligeramente, la mía oculta en el
pantalón, la suya desnuda, allí juntas como despidiéndose porque no volverían a
tocarse nunca. Supongo que por ese motivo ni ella ni yo hicimos ademán de
apartarnos y dejamos que se fueran consumiendo aquellos minutos que sabíamos eran
los últimos.
Finalmente, ella se levantó con dificultad y
murmuró que se iba a dormir. Supuse que se refería a que aquella noche ya no dormiríamos
juntos. […]
Publicadas por jimeneydas a la/s 5:39 p.m.
Etiquetas: Antologías
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
Uy... el poder de un símbolo.
Qué feo ha de sentirse que te digan así que se terminó.
No sé, una vez escuché que un poco de drama es más sano.
Supongo que depende de los involucrados en la ruptura :/
Publicar un comentario