De "El canto del pájaro", Anthony de Mello

El discípulo se quejaba constantemente a su maestro:

«No haces más que ocultarme

el secreto último del Zen».

Y se resistía a creer sus negativas.

Un día, el Maestro lo llevó a pasear por el monte.
Mientras andaban, oyeron cantar a un pájaro.


«¿Has oído el canto de ese pájaro?»,
le preguntó el Maestro.

«Sí», respondió el discípulo.
«Bien; ahora ya sabes que
no te he estado ocultando nada».

«Sí», asintió el discípulo.

viernes, 22 de julio de 2011

No me asquea
la pulpa de la lima
con gusanitos

3 comentarios:

Espaciolandesa dijo...

o_O

¿Le dan mejor sabor? :P

jimeneydas dijo...

Según los nutriólogos, se incrementa el aporte de proteínas, jeje

Unknown dijo...

Ouvi o canto do pássaro.
Difícil é entender o professor....