Y no importa si esa conversación no se dio, "se non è vero, è ben trovato". He aquí dos pruebas de cómo trabajan sus textos los grandes:

espacio irreverente,
desorganizado e indisciplinado
para perder el estrés...
En construcción, disculpe las molestias.
Mientras, tome usted media taza de café.
El discípulo se quejaba constantemente a su maestro:
«No haces más que ocultarme
el secreto último del Zen».
Y se resistía a creer sus negativas.
Un día, el Maestro lo llevó a pasear por el monte.
Mientras andaban, oyeron cantar a un pájaro.
«¿Has oído el canto de ese pájaro?»,
le preguntó el Maestro.
«Sí», respondió el discípulo.
«Bien; ahora ya sabes que
no te he estado ocultando nada».
«Sí», asintió el discípulo.
Publicadas por
jimeneydas
a la/s
9:04 a.m.
«¡Oh, prodigio maravilloso:
Puedo cortar madera
y sacar agua del pozo!»,
exclamó el Maestro de Zen cuando alcanzó la iluminación
Lo he comprendido al fin:
oigo un canto: veo una flor:
¡oh, que jamás se marchiten!
Netzahualcóyotl
Rey Texcocano, Siglo XV
6 comentarios:
¡Qué interesante! sabía que ambos tomaban la literatura como un trabajo que requería pulimento, pero no se me había venido a la mente el hecho de que publicaran para poder, de alguna manera, detener esa compulsión.
Saludos tapatíos.
Buen consejo ese de corregir hasta que no quede otra que publicar, si se lo tomara en cuenta, cuantas desilusiones menos tendríamos los lectores...
Bien por ellos, pero al corregir y tanto corregir, no podarás en demás tus letras. Un saludo amigo.
Creo que una nunca queda 100% satisfecha con algo que escribió.
Acá tenemos la opción de ir y editar, pero ya que ha salido un libro publicado no es tan fácil.
Tal vez de edición a edición, pero se perdería la obra original tal cual salió a la luz.
Igual podrían publicar otra versión, algo así como el análogo al "final cut" del cine.
Mmhh... puras joyas para los coleccionistas :P
Que excelente aporte!
Es realmente muy interesante!
Ahora que me ha dado por escribir en forma, ésa es mi pesadilla: Las correcciones. Casi que tengo que tachonear todo, termino quitando y poniendo tanto, que al final ya ni se parece a lo que en un principio quise escribir. Es horrible, adictivo y sumamente desgastante.
Salu2.
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